La película de Oliver Laxe, Sirat, tiene múltiples lecturas; una en particular es la política. ¿Qué aprendizajes se pueden extraer de la política implícita en la cultura ‘raver’? Me estreno en El País con un artículo sobre el fenómeno cinematográfico del año.

Mentres o ministro socialista deixa en evidencia un tipo de subcultura corrupta, caracterizada polo comisionista puteiro que confía a trama a un «asesor» porteiro de discoteca e a un fontaneiro de partido, o ministro popular descóbrenos un sofisticado tinglado lexislativo, integrado por altos cadros técnicos ministeriais, portas xiratorias e inmensos beneficios.

Vivimos un momento de transición en el que algunos intereses empresariales ya están invirtiendo en psiquedélicos sin pillarse los dedos y siempre bajo las lógicas capitalistas. Escribo en El Salto sobre qué está representando en el mundo empresarial el denominado Renacimiento Psiquedélico

Los recientes escándalos del PSOE son una trampa mortal para la izquierda, que estos días demuestra su declive irremediable en las encuestas. Esta trampa tiene un nombre en el ámbito de la teoría política: perfeccionismo moral. La autoexigencia de reducir al máximo la distancia entre los grandes ideales que se predican y la virtud pública que se ejerce a diario para bien. A lo largo de la historia de España, parece evidente que este error ha sido mucho más común en la izquierda que en la derecha. La izquierda valora sus ideales por no verlos realizados todavía, o al menos solo parcialmente, mientras que la derecha convive con sus errores […]

O perfeccionismo moral é o grande erro da esquerda. Sentir-se bem na superioridade moral respecto à direita, só convence as próprias forças. Mas nom mobiliza as que faltam para ganhar. Aquí é onde se joga o futuro. Sobre isto escrevo na revista Luzes.

Golpe a golpe, Trump impón a súa delirante axenda política. Perante isto, a «esquerda» resposta cun instrumental discursivo desfasado, sen entender que a linguaxe é fundamental no artellamento do político e que o reinado do pensamento ilustrado non abonda hoxe para reclamar un proxecto de emancipación.

Escrevo esta semana na revista Luzes, a raíz do que está acontecendo nos EE.UU. O réxime, tal e coma o conhecimos nas últimas décadas, afonde-se. No canto emerge umha realidade nova moito pior do que se puider esperar. Nom en van passarom corenta anos de neoliberalismo.

Precisamente hoy, que Ayuso vuelve a la carga contra la universidad, sale este artículo mío en el Catalunya Plural. Las políticas de todos estos años, desde la LRU hasta la LOSU van a ser pulverizadas. Al igual que hasta ahora todos los gobiernos han seguido a los EE.UU., la llegada de Trump al poder trae consigo una mala noticia para las universidades: los ultrarricos pueden relegarlas aún más, imponer recortes y líneas educativas contrarias a los desarrollos que hemos visto. ¿Reaccionará la universidad o ya es demasiado tarde para ella?

O meu artigo, «Aranceles, Fentanilo y diplomacia», escrito para CTXT, agora traduzido ao galego-portugués e publicado na revista Outra saude.

Ahir vaig anar un altre cop al No ho sé de l’Anna Vallohonesta. Un debat molt entretingut.

La nueva administración estadounidense está más abierta a contribuir al renacimiento psicodélico, pero las iglesias que utilizan este tipo de sustancias siguen encontrándose en una zona alegal.

Xa non se trata só de prescindir das determinacións do poder soberano, nin tampouco se trata tan só de xerar temporalmente as condicións dun discurso liberador. Trátase de morar durante un tempo, cada vez maior, a propia liberdade.

Sumar está a caer tanto que anda já perto dos níveis de um Podemos que aspira a entrar no Congreso com un par de deputadxs. O erro das esquerdas é pensar que só é políticamente útil quem aínda segue na súa partida e non mira para além de isto.

Señaló Paracelso que las drogas solo se distinguen de las medicinas y los venenos por la dosis. Entre el fentanilo como medicina y como droga solo media el poder. Un poder que China ha aprendido a manejar bien. Escribo en CTXT sobre la crisis provocada por el trumpismo y la crisis diplomática.

El #TrumpismoÁcido está librando ya su batalla en el seno del neoliberalismo estadounidense. Y aunque aquí nuestra derecha sigue anclada en el punitivismo, cualquier día salta la sorpresa. En el número de la revista Cáñamo de este mayo exploro la cuestión: ¿es posible una derecha lisérgica a la española?